El último balance del impacto del coronavirus en Reino Unido arroja unos datos dramáticos que muestran que todavía están lejos de doblegar la pandemia. En total, en las últimas 24 horas han contabilizado 626 muertes más por COVID-19 así como 4.700 nuevos casos.
Con estos datos, el balance total registra 31.241 muertes y 211.364 casos, lo que sitúa a Reino Unido como el país más afectado de Europa y el segundo en todo el mundo, solo por detrás de Estados Unidos, que contabiliza 77.000 decesos y más de 1,3 millones de casos.
Respecto al dato positivo, en el último día han disminuido las personas hospitalizadas, pasando de 12.688 a 11.788.
Según el ministro de Medio Ambiente, George Eustice, quien se ha encargado en esta ocasión de la rueda de prensa diaria del Gobierno, ha explicado que en todo el país se realizaron 97.029 test, cifra por debajo, por sexto día consecutivo, del objetivo diario de 100.000 test diarios planteados por el primer ministro Boris Johnson. Hasta el momento, en total se han realizado más de 1,6 millones de test.
En este contexto, Ejecutivo insiste en la importancia de que los ciudadanos sigan escrupulosamente las medidas adoptadas por el Gobierno para evitar contagios y el ‘premier’ británico ha prometido que dará a conocer el domingo la "hoja de ruta” para precisar cómo se llevará a cabo una desescalada que, no obstante, será sumamente lenta: “No habrá un cambio dramático de la noche a la mañana”, recalca, explicando que el Gobierno será “muy cauto” en sus decisiones.
Por otro lado, el Ejecutivo ha anunciado un plan de 16 millones de libras (algo más de 18,3 millones de euros) para ayudar a los ciudadanos más vulnerables a tener acceso a comida durante la pandemia. El programa ofrecerá millones de comidas durante las próximas 12 semanas a través de ONG.