La troika respalda dar a Portugal el próximo tramo del rescate financiero de 4.100 millones

EUROPA PRESS 04/06/2012 18:17

"Las autoridades están aplicando las políticas de reforma en términos amplios según lo acordado y el ajuste externo se está produciendo más rápido de lo previsto", han confirmado los inspectores de la troika en su informe cuatrimestral para valorar el grado de cumplimiento de Lisboa con los ajustes a cambio del rescate.

"En términos generales, esta revisión confirma que el programa está haciendo buenos progresos", aseguran las tres instituciones en su informe en el que confirman que no han abordado con las autoridades portuguesas la necesidad de promover "nuevas medidas" de consolidación fiscal aunque insisten en que se necesita "una supervisión estrecha para detectar potenciales desvíos a tiempo" aunque cree que el objetivo de rebajar el déficit al 4,5% en 2012 "está al alcance".

Los organismos se muestran a favor de recomendar el pago del próximo tramo del rescate de 4.100 millones de euros, de los cuáles 2.700 millones los aportaría la UE y 1.400 millones de euros el Fondo Monetario Internacional.

El próximo pago del rescate, que en total asciende a 86.000 millones de euros, podría producirse en julio, siempre que la Junta directiva del FMI y los ministros de Economía de los Veintisiete. La troika prevé desplazarse de nuevo a Portugal para seguir vigilando el cumplimiento de sus compromisos el próximo mes de septiembre.

En su informe, la troika reconoce que las exportaciones del país han mejorado, por lo que espera que la caída del PIB en 2012 se quede en el 3% frente al 3,25% previsto con anterioridad, y mantiene la perspectiva de crecimiento "positiva" en 2013, aunque "débil", aunque "las tensiones continuadas en la eurozona podrían representar un riesgo", sobre todo teniendo en cuenta la actual demanda doméstica "débil" del país.

Las tres instituciones admiten además que el desempleo podría alcanzar cerca del 16% de la población en 2013 "como parte del proceso de ajustes", sobre todo teniendo en cuenta "la demanda doméstica débil y las presiones sobre las empresas para reducir su elevado endeudamiento". "El aumento del desempleo requiere una acción política decisiva", admiten desde la troika.