La Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) ha anunciado encuentros con representantes sirios que tendrán lugar los próximos 24 y 25 de octubre y a través de los cuales los inspectores nucleares quieren aclarar qué albergaban instalaciones atacadas por Israel en Deir Alzour, una localidad situada en el noroeste de Siria.
El director general de la AIEA, Yukiya Amano, dijo el mes pasado que Siria se había ofrecido a colaborar en la investigación que la agencia quiere desarrollar sobre el complejo de Deir Alzour, bombardeado por las fuerzas israelíes en 2007 y, supuestamente, sede de un reactor nuclear de fabricación norcoreana.
Amano confía en que los inspectores puedan recibir una "información completa" sobre Deir Alzour. El régimen de Bashar al Assad siempre ha alegado que estas instalaciones únicamente albergaban equipos militares, pero la AIEA advirtió en mayo de que era "muy probable" que ocultase en su interior un reactor que no había sido declarado.
En junio, la junta de gobernadores de la agencia de la ONU aprobó informar al Consejo de Seguridad sobre la falta de cooperación brindada por Damasco al no proporcionar la información ni el acceso solicitados. Rusia y China se opusieron a dicha decisión, evidenciando una vez más las divisiones entre algunas de las principales potencias mundiales cuando se trata de Siria.