Cuando el pequeño Miguel desapareció en 2004, su ex niñera y madrina, Krystle Rochelle Tanner, fue acusada, en los primeros momentos, de habérselo llevado. Luego, esta hipótesis perdió fuerza. Fue el pasado verano, cuando el equipo del Servicio de Bienestar del Menor del Condado de San Agustín, localidad situada a unos 150 kilómetros al noreste de Houston, recibió una denuncia de que Tanner y su novio estaban descuidando a sus dos hijos.
Las autoridades trataron de encontrar entonces al chico mayor. Tanner contó entonces historias diferentes sobre el niño que hicieron sospechar a la policía y se abrió una investigación que se volvió complicada porque a Miguel Morín se le había eliminado de la base de datos nacional de niños desaparecidos. Finalmente la pista de que Tanner fuera ya sospecha en el secuestro de 2004, llevó a las autoridades su detención el pasado lunes. La ex niñera secuestradora, en prisión sin fianza, se enfrenta a un cargo de secuestro y está bajo custodia policial en San Agustín.
Uno de los parientes de Tanner llevó a la policía hasta al niño, pero negó saber que había sido secuestrado, recoge Fox News en su edición digital.
Miguel Morín, al parecer, nunca ha estado en la escuela y, por su aparicencia, no parece que su vida haya sido muy fácil. Las autoridades están preparando el reecuentro con su familia muy pronto.Ellos le esperan con los brazos abiertos. "Le queremos mucho y nunca nos rendimos".