Seúl muestra su flexibilidad respecto al formato de unas eventuales conversaciones con Pyongyang

EUROPA PRESS 02/01/2015 05:26

"El Norte tendrá que participar en un diálogo sin condiciones previas si tiene verdadera voluntad de mejorar las relaciones bilaterales", ha dicho el portavoz del Ministerio de Unificación surcoreano, Lim Byeng Cheol, quien ha recalcado que Seúl no restringirá el formato de las conversaciones.

Por su parte, el primer ministro surcoreano, Chung Hong Won, ha dicho que su Gobierno "hará esfuerzos para resolver la situación de confrontación y para abrir la puerta a un diálogo destinado a la prosperidad mutua".

"Este año, Corea del Sur debe establecer una paz duradera en la península coreana y dar un paso hacia la unificación", ha resaltado, según ha informado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.

Chung se ha hecho eco así de las declaraciones formuladas el jueves por la presidenta del país, quien se comprometió a fijar en 2015 las bases "sustanciales y específicas" para lograr una reunificación de la península coreana y poner fin así a "siete décadas de división".

Hasta la fecha, Corea del Norte no ha aceptado ni rechazado esa oferta aunque Kim ha apostado en su último discurso por entablar contactos al más alto nivel con sus vecinos del sur y ha abogado por realizar "un gran cambio" en las relaciones bilaterales.

La última vez que ambas partes celebraron conversaciones ministeriales fue en mayo de 2007, en Seúl, aunque sostuvieron conversaciones de alto nivel en febrero de 2014, en las que acordaron celebrar la reunión ministerial a finales de octubre o comienzos de noviembre.

Corea del Norte se retractó posteriormente, por el malestar que le generó el lanzamiento desde la frontera de panfletos de propaganda antinorcoreana por parte de grupos civiles surcoreanos.

En los últimos meses, Park ha realizado discursos para promover la unificación, que ha definido como una "bonanza" para Corea del Sur y una bendición para los países vecinos. Corea del Norte ve con recelos la unificación por el temor a que realmente se trate de una maniobra para tratar de acabar con el régimen que lidera el joven Kim.

Park ha manifestado su deseo de la apertura de una nueva era de cambio y esperanza y ha asegurado que trabajará para revitalizar la economía y hacer frente a las irregularidades profundamente arraigadas, a fin de hacer que el país sea un lugar más seguro en el que vivir.