El grupo islamista armado somalí Al Shabaab ha advertido este jueves de que Kenia deberá "afrontar las consecuencias" por haber "comenzado la guerra" con el despliegue de sus tropas en territorio de Somalia.
"El tiempo de pedir a Kenia que pare la guerra ha pasado. La única opción es combatirle", declaró el portavoz de Al Shabaab, el jeque Muktar Robow Abu Mansoor, ante un grupo de manifestantes en Mogadiscio. "Kenia, tú has comenzado la guerra y tú deberás afrontar las consecuencias", aseveró.
Por otra parte, al menos cuatro personas podrían haber muerto este jueves en el noreste de Kenia (cerca de la frontera con Somalia) a causa de un ataque contra un vehículo gubernamental, según informaron los medios y los habitantes locales.
Algunos habitantes de la localidad de Mandera han sido informados de que al menos cuatro personas podrían haber muerto a causa de un ataque con granada contra un edificio gubernamental que transportaba material escolar.
"Hemos sido informados de un acto de bandidaje en el distrito de Mandera, a unos 110 kilómetros de la ciudad de Mandera, en el que se vio implicado, entre otros, un vehículo que transportab a responsables del Gobierno", declaró, por su parte, un portavoz de la Policía, Eric Kiraithe.
"El comandante de la Policía de distrito y su equipo de seguridad están procediendo desde el lugar. Daremos más detalles a su debido momento. No se ha confirmado todavía ninguna información sobre víctimas ni sobre otras circunstancias", añadió en un comunicado.
OFENSIVA CONTRA AL SHABAAB
Mandera se encuentra en una zona escasamente poblada del noreste, cerca de las porosas fronteras con Etiopía y Somalia. El Ejército keniano desplegó sus tropas hace doce días en territorio de Somalia en el marco de una operación contra Al Shabaab, autor de incursiones y secuestros (incluidos los de dos cooperantes españolas) en territorio keniano. Al Shabaab ha jurado venganza.
El pasado lunes, dos ataques con granada en la capital de Kenia, Nairobi, causaron la muerte de una persona y heridas a otras 20. Un ciudadano keniano se declaró culpable ayer miércoles y aseguró que era miembro de Al Shabaab.