El pastor Rasendrahasina Lala, en nombre de la Confederación de Iglesias Cristianas (FFKM), organizadora de la Conferencia, dijo hoy a los periodistas que habían acudido al encuentro en un hotel de Antananarivo sólo ellos y la representación de la ONU, mientras el Gobierno, la oposición y la sociedad civil malgaches estuvieron ausentes.
En estas circunstancias, el presidente de Senegal, Abdoulaye Wade, invitó al presidente de Madagascar, Marc Ravalomanana, y su rival político, el ex alcalde de Antananarivo Andry Rajoelina, a viajar a Dakar para negociar una salida a la crisis política que atraviesa su país.
En un comunicado difundido hoy en Dakar, la Presidencia senegalesa afirma haber recibido una nueva petición del presidente malgache en la que solicita la mediación de Wade en la crisis, "en los mismos términos que su adversario hace unos días".
"Teniendo en cuenta la situación actual, el presidente Wade invita a las dos partes a trasladarse a Dakar para negociar", después de que ambas hubieran pedido su mediación, recalca el comunicado.
La situación en Madagascar es confusa, después de que el coronel Andre Ndrianarijaona se declarase ayer al mando del Ejército, tras obligar a dimitir al ministro de Defensa, vicealmirante Mamy Ranaivoniarivo, y al jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Amadas, general Edmond Rasolomahandry.
El coronel se ha rebelado contra el Gobierno del presidente Ravalomanana, pero no ha dicho que apoye a la oposición que encabeza Rajoelina.
Antes de dimitir forzado por Ndrianarijaona, Rasolomahandry dio un plazo de 72 horas a las fuerzas políticas para solucionar la crisis política y dijo que, en caso contrario, las Fuerzas Armadas se harían con el control del país, aunque recalcó que no buscaban ocupar el Gobierno.
Unas 140 personas han muerto de forma violenta desde que Rajoelina inició las protestas contra el Gobierno hace mes y medio.
Rajoelina, un antiguo pinchadiscos convertido en político populista, reclama la dimisión de Ravalomanana, al que acusa de malversación de fondos públicos y de violar la Constitución, y pretende instalar su propia administración, para lo cual ha pedido el apoyo de los militares con el fin de derrocar al Gobierno.
Las próximas elecciones presidenciales en Madagascar están previstas en 2011 y Rajoelina no podrá presentarse, ya que la Constitución malgache exige que los jefes del Estado deben superar los 40 años y él tiene sólo 34.