El folleto aconseja a las personas que piensen sobre cómo lidiar si no hay calefacción, se dificulta la compra, preparación y almacenamiento de alimentos, no hay agua en los grifos o el inodoro, y los cajeros automáticos, los teléfonos móviles e Internet dejan de funcionar.
Entre los consejos recomiendan abastecerse de botellas de agua, ropa de abrigo y sacos de dormir, y "alimentos no perecederos que se puedan preparar rápidamente". El panfleto de 20 páginas también prepara a la población para los peligros como los ataques cibernéticos y terroristas y el cambio climático, e incluye una página para identificar noticias falsas.
La publicación surge en torno al debate sobre la seguridad y la posibilidad de unirse a la OTAN se intensificó en Suecia a raíz de la anexión de Crimea en 2014. Las recientes incursiones en el espacio aéreo y las aguas territoriales suecas por parte de aviones y submarinos rusos han incrementado la tensión.
"La sociedad es vulnerable, por lo que debemos prepararnos como individuos", dijo Dan Eliasson, de la agencia sueca de contingencias civiles, que está a cargo del proyecto. "También hay un déficit de información en términos de asesoramiento concreto, que pretendemos proporcionar".
200 años sin ser atacados
Suecia no ha estado en guerra con otro país por más de 200 años. El folleto dice: "nunca nos daremos por vencidos", todo una carta de intención en caso de ser atacados. El país comenzó a revertir los recortes del gasto militar y el año pasado realizó sus mayores ejercicios militares en casi un cuarto de siglo, y votó para reintroducir el reclutamiento y la revelación de planes conjuntos con Dinamarca para contrarrestar los ciberataques y la desinformación en Rusia.
"Aunque Suecia es más segura que muchos otros países, todavía hay amenazas a nuestra seguridad e independencia", recoge The Guardian. "Si estás preparado, estás contribuyendo a mejorar la capacidad del país para hacer frente a una gran tensión". En caso de conflicto armado, "todos están obligados a contribuir. Es decir, cualquier persona entre los 16 y los 70 años de edad.
Advierten que "los estados y las organizaciones ya están tratando de influir" en la forma de pensar de los habitantes y no deben tolerarlo. La volutad de defensa es lo que tiene que priorizar.