Tusk avisa a los británicos de que si no votan contra el 'Brexit' los enemigos de la UE "abrirán el champán"

EUROPA PRESS 20/06/2016 15:51

"No tengo duda de que nuestros enemigos, internos y externos, abrirán botellas de champán si el resultado es negativo para nosotros y favorable al 'Brexit'. Mi mayo temor es que un resultado negativo anime a otros euroescépticos en Europa", ha declarado Tusk, en una rueda de prensa ofrecida en Portugal.

Tusk ha insistido en que las consecuencias económicas y geopolíticas de un eventual abandono de Reino Unido serían "impredecibles", "lo que en política siempre quiere decir 'muy peligroso'".

El exprimer ministro polaco ha considerado que el 'Brexit' sería el primer paso en el proceso de "desintegración" europea y ha insistido en la voluntad de los Estados miembros y ciudadanos europeos de que "Reino Unido siga siendo parte de la Unión Europea".

"Quisiera hacer un llamamiento a todos los británicos: Quedaos con nosotros. Os necesitamos, sin vosotros Europa y toda la comunidad occidental y transatlántica se hará más débil", ha pedido.

En cualquier caso, el presidente del Consejo ha pedido que, sea cual sea el resultado de la consulta británica, los Estados miembros inicien una "larga y dura" reflexión sobre el futuro de la Unión.

"Seríamos unos ingenuos si ignorásemos una señal de alarma como la del referéndum de Reino Unido. Hay más señales de desafección con la UE que llegan desde toda Europa", ha añadido.

Tusk ha hecho estas declaraciones acompañado por el primer ministro portugués, Antonio Costa, tras una reunión bilateral en Lisboa.

Costa también se ha sumado a la llamada a favor de la continuidad de Reino Unido como socio dentro de la UE, si bien ha añadido que independientemente de cuál sea el resultado del 23J, "Europa y Reino Unido deben estar siempre juntos, cualquiera que sea la forma.

A la mañana siguiente del referéndum, Tusk se reunirá en Bruselas con el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, y el jefe del Ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, para coordinar la respuesta europea.

Se trata de una reunión pensada para enviar una señal política común tras la consulta, si bien las decisiones o pasos de calado no se producirán antes de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE los días 28 y 29 en la capital europea.