Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE han aprobado este lunes congelar los activos financieros en suelo europeo de otras dos entidades afines al régimen del presidente sirio, Bashar al Assad, y los de otras 28 personas próximas al mismo, que también tendrán prohibido viajar a la Unión Europea. Asimismo, han prohibido a particulares y empresas que colaboren, mediante la oferta de servicios de transporte o de seguros, en la exportación de armas sirias a terceros países a fin de impedir que el régimen obtenga ingresos por su venta, según han confirmado fuentes europeas.
Las dos nuevas corporaciones han sido sancionadas por estar "vinculadas a la compra de materiales que pueden ser utilizados para la represión interna", mientras que las 28 personas que se añadirán al régimen de sanciones individuales son "responsables de la represión" contra la población civil sobre el terreno, según han precisado las fuentes.
Más de 150 personas vinculadas al régimen, incluido el propio presidente, Bashar al Assad, su mujer Asma y varios familiares más como su hermano Maher, identificado como el principal responsable de la represión en el país ya han sido sancionados en rondas anteriores, así como más de medio centenar de empresas y corporaciones.
Los Veintisiete, que ya han avisado de que seguirán reforzando las sanciones contra Damasco hasta que se ponga fin a la violencia sobre el terreno, también han prohibido este lunes a particulares nacionales y empresas europeas suministrar "servicios de exportación de armas del régimen sirio", es decir, "transportar o asegurar" este tipo de cargamentos, con el objetivo de impedir que Damasco pueda obtener ingresos por la venta de armas a terceros países, según han explicado fuentes europeas.
Las nuevas sanciones entrarán en vigor cuando se publiquen en el Diario Oficial de la UE este martes, según han precisado las mismas fuentes.
La UE ya aprobó en mayo de 2011 un embargo de armas a Siria y de materiales susceptibles de ser utilizados para reprimir a la población. También ha prohibido a los Estados miembros dar créditos, préstamos, seguros y reseguros, así como asistencia técnica al régimen para exportar armas y equipos para represión interna.
Además en julio, los Veintisiete aprobaron inspecciones obligatorias en sus puertos, aguas territoriales y aeropuertos a buques y aviones con destino a Siria si sospechan de que llevan cargamentos de armas o equipos para la represión interna y apresar los cargamentos. También obligaron a los aviones y barcos con destino a Siria a que les den aviso previo de su llegada y partida e información sobre su carga.
En rondas de sanciones anteriores, la UE ya aprobó también un embargo al crudo y productos derivados del petróleo y prohibió las inversiones en la industria petrolera del país y en compañías implicadas en la construcción de nuevas plantas, así como la exportación de materiales y tecnologías claves para el sector energético.
Los Veintisiete también han congelado los activos del Banco Central Sirio bajo jurisdicción europea, aunque permiten bajo estrictas condiciones el comercio legítimo. También han prohibido las transacciones comerciales en oro, metales preciosos y diamantes con el Banco Central del país y el Gobierno, al que tampoco pueden conceder ya nuevos préstamos o créditos.
Asimismo, han prohibido la apertura de nuevas sucursales bancarias o filiales en la UE a las instituciones financieras sirias, han prohibido la exportación de bienes de lujo a Siria y han prohibido a los aviones de carga de aerolíneas sirias acceder a ningún aeropuerto de la UE, entre otras sanciones.