Las autoridades han pedido a los residentes no salir de sus casas durante la relativa calma del ojo del Willa, porque los vientos pueden aumentar peligrosamente de forma repentina a su paso, según ha publicado el periódico mexicano Excélsior.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha señalado que el huracán se mueve a 17 kilómetros por hora, con vientos sostenidos de 195 kilómetros por hora. El gobernador del estado de Nayarit, Antonio Echevarría García ha informado que de más de 12.000 vecinos han sido evacuados forzosamente, aunque "respetando los Derechos Humanos".
Las autoridades buscan proteger la vida de los habitantes del estado y ha subrayado que es "comprensible" que muchos no quieran abandonar sus viviendas ante el temor de sufrir hurtos.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos advirtió que la tormenta probablemente traería “marejadas, vientos y lluvias peligrosos para la vida” a partes del suroeste y el centro-oeste de México. Willa es uno de los huracanes más poderosos que ha alcanzado la costa occidental de México en los últimos años, y se espera que se debilite a medida que avance tierra adentro.