"Tenía veinte años y un cuerpo escultural", afirma el fotógrafo de estas instantáneas. Martin Schreiber. Este hombre era por aquellos años profesor en la Universidad de Nueva York y necesitaba una modelo para sus alumnos de dibujo.
Apareció Madonna, una joven a la que le pagaban 30 dólares por sesión. El ex profesor la describe como una joven tímida e introvertida que no tenía adonde ir en aquella ciudad gigante, adonde acababa de llegar.
Schreiber le ofreció su apartamento y compartieron piso durante varias semanas.
De aquella parte de la historia de Madonna han quedado esta docena de fotos que ahora se muestran en Brighton, a pocos kilómetros de la capital británica.
Las fotografías están a la venta por 5.000 dólares. Ahora, Madonna se cotiza más alto.ZA