Con 15 años, será juzgada como adulta tras confesar el asesinato e incineración de su madre

Informativos Telecinco 25/06/2018 13:55

La joven será juzgada como una adulta por el presunto asesinato de su madre, Peggy Schroeder, a quien, según ha confesado, disparó en la cabeza. Los hechos ocurrieron en su casa de Illinois en el mes de julio del pasado verano, cuando solo tenía 15 años de edad, informa la revista People.

Ahora, la menor será acusada por dos cargos por cometer un asesinato en primer grado, incendio provocado y la ocultación del crimen.

Los fiscales alegan que la menor mantenía una relación con otra chica de 16 años, Rachel Helm. Según las declaraciones recogidas por el diario local Saulk Valley, Schroeder declaró que ambas tenían miedo de que la madre de la acusada no aprobara su noviazgo.

Siguiendo las declaraciones de la joven, cuando Peggy Schroeder llegó a casa el día 6 de julio, le ordenó que se pusiera una toalla en la cara antes de dispararle.

Tras esto, el detective del Condado de Whiteside David Molina asegura que la acusada llamó a su compañera para confesarle el asesinato y le envió una foto del cuerpo sin vida de su madre como prueba.

Según el detective, Helm acudió a la residencia de los Schroeder para ayudar a su pareja a ocultar el crimen y limpiar la sangre de la víctima. Dos días después, relata, las menores prendieron fuego a la casa con el cuerpo en su interior con el fin de eliminar pruebas.

Sin embargo, cuando la novia de la acusada regresó a su casa, le confesó el crimen a su madre, quien alertó inmediatamente a la policía. Esa misma noche, Anna Schroeder confesó ser la culpable del asesinato.

La jueza decidió que el caso seria juzgado en un tribunal adulto y describió el suceso como un crimen "atroz" cometido por una persona que no sintió el menor remordimiento, según informa el medio.

Schroeder podría enfrentarse a entre 20 y 60 años de prisión sin libertad condicional o reducción de condena. Además de una pena adicional de 3 a 7 años por incendio provocado, y de 2 a 5 años por ocultamiento del crimen.

Por contra, si el juez decide juzgarla como menor, deberá permanecer en un centro de menores hasta que cumpla los 21 años.