Calderolli recordó la crisis económica actual para señalar que "es injusto que el mundo del fútbol no participe en el sacrificio que está haciendo el resto de italianos", dijo en referencia a los recortes previstos en el plan de ajuste presentado por el gobierno italiano.
El ministro prosiguió diciendo que "sería un gran gesto que los jugadores y la Federación devolviesen el dinero". Por último pidió a los clubes del país que también "reduzcan los salarios de los jugadores".