"Acumulamos 35 meses seguidos de descenso, un desgaste difícil de soportar para cualquier sector económico, como le ocurre al comercio minorista, que se encuentra en una situación tremendamente difícil", ha asegurado García-Izquierdo en un comunicado.
Por productos, las ventas de alimentación siguen su paulatino descenso inciado en 2012 (-1,9%) y equipamiento personal (ropa, calzado o perfumería) vuelve a niveles de meses anteriores, con una tasa interanual del -9,2% en el mes de mayo.
Por otro lado, la CEC vuelve a reiterar que una posible subida impositiva sería muy perjudicial para el pequeño y mediano comercio. "A pesar del descenso de las ventas, nuestro sector sigue demostrando mejor capacidad en el mantenimiento del empleo, especialmente los pequeños formatos, una clave que ni Bruselas ni el Gobierno pueden menospreciar a la hora de plantearse un posible incremento de la presión fiscal, que nos lo podría muy difícil", ha señalado.