"¿Quieres ser mi hija para siempre?". Con estas palabras Diogo Bolant, de 37 años, se dirigía a la hija de la que se acababa de convertir en su esposa, según informa 'Mirror'.
La pequeña Isidora, que era la dama de honor de su madre, no dudó ni un segundo y respondió "sí". Tras ello, el hombre sacó un anillo y se lo puso en su dedo.
Esto sucedió durante una ceremonia que tuvo lugar en Sao Bernardo do Campo, Brasil. "Isidora siempre ha querido que nos casáramos y por eso he querido dedicarle un momento especial durante la ceremonia", ha dicho Diogo.
Aunque todo estaba preparado, la niña no tenía la menor idea de lo que iba a suceder. Isidora está encantada con su nuevo "padre" y con su nuevo anillo.