Lo que apuntaba a un estreno plácido terminó truncándose y de qué manera para el balear. Nadal, dispuesto a dar continuidad a las buenas sensaciones de Indian Wells, comenzó con buen pie en el primer set, aunque desaprovechó muchas bolas de 'break'. Después, el bosnio resucitó en el segundo parcial tras pedir también asistencia.
La pastilla milagrosa que recibió Dzumhur y una gran mejora en su tenis le permitió meterse de lleno en el encuentro. Con 1-1 en parciales, Nadal llamó al médico y, tras los dos primeros juegos, le confesó un fuerte malestar. Pese a intentar reanudar el partido, Nadal se mostró cabizbajo y encogido, incapaz de correr.
De esta forma, tras un 3-0 en el tercer parcial, Nadal terminó retirándose en segunda ronda. Un freno imprevisto para el de Manacor, que buscaba dar continuidad a la pasada semana, donde firmó sólidas victorias hasta llegar a tutear por primera vez en mucho tiempo al número uno del mundo, Novak Djokovic, en semifinales.