Especial gripe: preguntamos a los expertos si viene fuerte este año y si deberías vacunarte

eltiempohoy.es 08/11/2018 17:45

Según el Sistema de Vigilancia de la Gripe en España, uno de los dos de los estamentos encargados de la vigilancia de la enfermedad en España junto a la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE), la temporada pasada (2017-18) la epidemia se caracterizó por una circulación mixta de virus de la gripe B y A(H3N2) y una duración mayor de lo habitual. Los mayores de 64 años fueron los más afectados, con un número considerable de hospitalizaciones con gripe grave y defunciones.

Un dato a tener en cuenta en este último caso, la cobertura vacunal en esas edades ha seguido disminuyendo en España, pasando del 56,9% en la temporada 2010-11 a 51,4% en la temporada pasada. Solo la mitad de la población española mayor de 64 años se pudo beneficiar de la protección de la vacuna, factor importante para entender el elevado impacto de mortalidad durante la pasada temporada.

En base a todos los datos recogidos, se estima que hubo desde el año pasado 700.000 casos leves y alrededor de 52.000 hospitalizados, de los que 14.000 tuvieron complicaciones graves y unos 3.000 tuvieron que ser ingresados en la UCI. Asimismo, se considera que cerca de 15.000 personas murieron por causas relacionadas con la gripe, cifras todas a tener en cuenta y que nos demuestran la importancia que hay que darle a esta dolencia nada banal.

Desde septiembre de 2017 a enero de 2018, la actividad gripal fue moderada o elevada en comparación con las temporadas previas en el hemisferio norte, registrándose niveles de actividad, hospitalizaciones y mortalidad altas en Norteamérica.

En Europa, los indicadores hablan de moderación, siendo ligeramente superior en algunos países con respecto a temporadas anteriores, con un mayor número de hospitalizaciones e ingresos en las unidades de críticos. De tal manera que la OMS ha recomendado que las vacunas tetravalentes para esta temporada estén basadas en las cepas que se produjeron en Michigan y Singapur, en el caso de los virus A, y Colorado y Phuket, para los de la B.

La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica es contundente y recomienda a los grupos de riesgo el uso de vacunas antigripal y antineumocócica porque son más los beneficios que los riesgos y se puede llegar a prevenir la dolencia con una eficacia entre el 40 y el 60%, además de disminuir la gravedad en caso de contraerla.

"Las infecciones respiratorias son las causantes de un buen número de ingresos hospitalarios y visitas a las urgencias en este época del año", señala Francisco Sanz, neumólogo y miembro del Área de Infecciones Respiratorias de SEPAR, que asegura que la medida más eficaz para prevenirla es "la vacunación", sin olvidar que "son necesarias al menos dos semanas para desarrollar la protección inmunológica".

Asimismo, un efecto beneficioso, según el especialista, es que "frena el efecto contagio", un tema a tener muy en cuenta para las personas que trabajan en centros de salud, residencias geriátricas, los trabajadores de las emergencias sanitarias, bomberos, cuerpos de seguridad, funcionarios de centros penitenciarios, entre otros.

Sanz subraya que este tipo de infecciones víricas "facilitan la actuación de las bacterias que pueden producir neumonía" y la vacunación "tiene un relativo efecto protector en estos casos", aunque la "infección por neumococo tiene sus propias vacunas preventivas: la polisacárida de 23 serotipos (VNP23), que necesita de revacunación a los cinco años, y la conjugada de 13 serotipos (VNC13)", recuerdan.

Este medicamento se puede administrar a cualquier edad a partir de las seis semanas de vida y los neumólogos la recomiendan para los mayores de 65 años y aquellos de cualquier edad que presenten enfermedades crónicas respiratorias, hepáticas, renales, cardiovasculares, diabetes, tabaquismo y alcoholismo, además de inmunodeprimidos.