"Hemos encontrado en los canales partes de un cuerpo. Las pruebas de ADN del primero de los varios restos que hemos encontrado confirman que se trata de Paul". Así confirmaba el periodistas Melchor Miralles, a través de su cuenta en Twitter (@melchormiralles", el peor de los desenlances.
La noche de su desaparición, el martes 12 de abril, Paul, de 38 años, fue a tomar unas copas después de trabajar. Según las últimas personas que estuvieron con él iba un poco bebido. Paul llevaba puesto una chaqueta de cuero negro, jeans negro y zapatos converse negro, la ropa que exige el Hard Rock Café donde trabajaba. Desde ese momento se perdió su pista.
Hace un par de días unos amigos, que al parecer conocían muy bien a Paul, aseguraron ver su cuerpo en el agua. Cuando llegaron los buzos de la policía el cuerpo ya se había hundido y no dieron con él. El propio Miralles dijo que "los que habían visto el cuerpo lo conocían y aseguraban que era él".
"En nombre de toda mi familia os agradezco muchísimo todo lo que habéis hecho por nosotros. De todo corazón. Mil gracias. Me gustaría responderos uno a uno pero sois tantos que me va a ser imposible. Mil gracias por vuestro apoyo", Miralles ha querido agradecer el apoyo recibido durante estos días.