Según su abogada, Inés Miranda, Aminatu Haidar mantiene en el hospital la huelga de hambre que inició hace 32 días como protesta para poder regresar a la capital del Sáhara Occidental después de haber sido expulsada el 14 de noviembre por las autoridades marroquíes tras recibir un premio de derechos humanos en Estados Unidos.
José Morales, miembro de la Plataforma de Apoyo a la saharaui, afirma que se encuentra "lúcida y consciente" y que su ingreso les genera "tranquilidad" por el hecho de que está bajo observación médica, lo que permite un mayor control para tratar de evitar "una situación dramática".
Estuvo muy grave
A las 01:10 horas (hora peninsular) de este jueves, la activista dio permiso a sus asistentes para que avisaran al 112 porque se encontraba mal y sobre las 01:30 horas en el Hospital Doctor José Molina Orozco, de la capital lanzaroteña.
"Estaba grave y muy mal y no podía levantarse", ha explicado Isemo Mussa, quien, junto a los miembros de la Plataforma de Apoyo Aminatu Haidar y del colectivo saharaui, se trasladaron de inmediato al hospital para conocer la situación de la activista.
Pasadas las dos de la madrugada, su abogada, Inés Miranda, ha explicado a los periodistas que Haidar "después de 31 días en huelga de hambre" había tenido "vómitos continuos, no de sangre, pero si arcadas y abundantes vómitos".
Pese a ser atendida por los facultativos, Haidar "continúa con la huelga de hambre; no está habiendo nutrición", dijo su abogada.
El presidente del Gobierno ha asegurado a los medios de comunicación a su llegada al Congreso, que la solución del caso Haidar "va mejor". Desde el Parlamento Europeo también son optimistas y han decidido no pronunciarse sobre la situación de la activista y suprimir la votación prevista para este jueves. El líder socialista, Martin Schulz, ha explicado que la decisión responde a un intento por mantener la "discreción" y porque "se vislumbra una solución" para hoy. BQM/RSO