Todo ha ocurrido a media mañana. Paloma, que realiza labores de administración en la Facultad de Derecho de la UNED, se empezó a sentir indispuesta sin motivo aparente por lo que se dirigió hacia el baño para aliviar los síntomas que tenía.
Una vez allí, y sin saber que estaba embarazada, la mujer, madre de otros tres hijos, se empezó a poner de parto. Nadie oyó nada y nadie se percató de lo ocurrido hasta que un compañero dio la voz de alarma cuando todo ya había pasado.
"Nos avisaron de que había alguien en el baño con un niño. Cuando yo llegué vi a Paloma sentada en la taza con la pequeña en los brazos", asegura Conchi que ha asistido a la mujer durante el parto.
"Yo iba haciendo lo que por teléfono me iban indicando los servicios de emergencias. Me dijeron de tenía que anudar el cordón umbilical y así hice", relata la compañera.
De esta manera, cuando llegaron los efectivos del Samur, sólo tuvieron que tomar las constantes vitales tanto de la madre como del pequeño y procedieron a cortar el cordón.
"Paloma estaba en estado de shock. No reaccionaba, Sólo me daba las gracias pero yo le decía que me tenía que ayudar a terminar aquello. Ella estaba nerviosa pero yo también porque nunca había asistido en un parto", ha comentado Conchi.
Ahora, tanto madre como hija se encuentran ingresadas en buen estado de salud en la maternidad del Gregorio Marañón.EPF
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