Su salvador puso al perro en una carretilla y lo llevó al veterinario que lo encontró tan malherido que no tuvo más remedio que sacrificarlo. Ahora se han publicado unas fotos, recogidas por el diario The Sun, que muestran el lamentable estado en el que estaba el animal abandonado en la localidad inglesa de Lossiemouth, Moray. La policía quiere encontrar al dueño.
Un inspector de policía ha explicado que "el animal no podía mantenerse en pie por si mismo de lo débil que estaba y además padecía una terrible enfermedad en la piel. La salud del perro se había ido deteriorando durante varios meses". "Tenemos que encontrar a quien hizo esto porque no hay escusa para tratar así a aun animal".
El o los propietarios podrían enfrentarse a seis meses de cárcel y a una multa de hasta cinco mil euros si son condenados por abandono animal. Un concejal ha hecho un llamamiento para que quien conozca al animal diga quien ha hecho algo tan cruel con su mascota. EBP