Según ha informado la Jefatura Superior de Policía, la investigación comenzó en septiembre de 2009 pero la profesionalidad y hermetismo de los investigados, de origen chino, han dificultado su detención.
Los agentes constataron que uno de los ahora arrestados desempeñaba esta actividad desde 2009 y había realizado multitud de compras fraudulentas en Madrid y otras regiones españolas.
La investigación reveló que los miembros de la banda recibían las numeraciones de las tarjetas bancarias de terceros países, fundamentalmente de China y Malasia, que conseguían a través de ataques informáticos llevados a cabo por "hackers" en internet.
Con estas numeraciones fabricaban tarjetas idénticas a la de cualquier entidad bancaria que utilizaban para realizar compras, en su mayoría en perfumerías, joyerías y tiendas de artículos de lujo, para lo que también usaban documentación falsificada que les acreditaba como titulares de las mismas.
La Policía ha detenido finalmente a los tres responsables de la banda y ha registrado sus domicilios, ubicados en Fuenlabrada, Madrid capital y Getafe.
En este último se ha descubierto un laboratorio completo equipado con máquinas troqueladoras y de impresión, capaces de reproducir a la perfección el diseño de cualquier tarjeta de crédito, además de un centenar de tarjetas preparadas para realizar compras, material informático y algunos de los efectos que habían adquirido fraudulentamente.