Detenidas 59 personas tras caer una red de tráfico de cocaína de Colombia

AGENCIA EFE 07/08/2010 14:00

Según informa la Guardia Civil en una nota de prensa, la red operaba en Cantabria, Madrid, Valencia, Vizcaya, Vitoria y Valladolid, y disponía de infraestructura en Colombia y Argentina.

Dentro de esta operación, que se ha denominado "Andrómeda" y que la Guardia Civil da ya por finalizada, se han realizado 19 registros (18 en domicilios y uno en un establecimiento comercial), y se han desmantelado tres laboratorios de procesamiento y adulteración de droga.

Además, se han intervenido 16,5 kilos de cocaína, la mayor parte oculta con cacao, 1.100 euros falsos y 351 tiras holográficas adhesivas, que presuntamente se utilizaban para falsificar billetes de 20 euros.

Esta operación comenzó en julio de 2009, al tener indicios de que en un establecimiento hostelero de Astillero (Cantabria), regentado por un ciudadano colombiano, se podía estar traficando con estupefacientes.

En junio pasado, la Guardia Civil de Cantabria ya anunció que había detenido a 38 personas y que había intervenido 16,5 kilos de cocaína dentro de esta operación "Andrómeda".

Cuando la Guardia Civil comenzó a sospechar del ciudadano colombiano que regentaba ese local en Astillero intensificó la vigilancia y comprobó que, además de presuntamente distribuir sustancias estupefacientes, esa persona y otra, vecina de Santander, lo hacían por clubs de alterne de Cantabria, Valladolid, Vitoria y Vizcaya.

También se detectó que formaban parte de otra red que, presumiblemente, falsificaba moneda en Cantabria y Vizcaya.

La Guardia Civil averiguó que las sustancias estupefacientes provenían de ciudadanos naturales de Colombia, Ecuador y República Dominicana residentes en la ciudad de Santander, que distribuían la droga por toda Cantabria y Bilbao.

Los principales responsables de la red tenían establecidos dos centros de operaciones distintos: uno en Madrid y otro en Valencia, donde a su vez habían conformado otra red de distribución de drogas.

Además, se cree que la trama tenía infraestructura en Colombia para adquirir la droga y organizar su introducción en España.

Supuestamente, la droga se introducía en este país de tres formas diferentes: bien por vía aérea, en polvo dentro de maletas o en líquido oculta en botes de champú, o bien por vía marítima, disuelta en cacao en polvo.

La primera detención dentro de esta operación se produjo el 29 de enero de este año, cuando la Guardia Civil interceptó en el Aeropuerto de Barajas un kilo de cocaína en polvo ocultó en una maleta fabricada expresamente para el narcotráfico, que evita que la droga sea detectada por los escáner.

El propietario de la maleta era un ciudadano austríaco, vecino de Laredo, que llegó a Barajas procedente de Buenos Aires (Argentina).

Dos días más tarde, se intervinieron en el Aeropuerto de Medellín (Colombia) otros tres kilos de cocaína que iban a ser introducidos en España ocultos en botes de champú por un ciudadano colombiano.

La red volvió a intentar introducir droga oculta en una maleta el 27 de marzo, pero la persona que la traía, un español procedente de Argentina, también fue detenida.

La Guardia Civil averiguó también que los miembros de la banda estaban intentando vender en 1 millón de euros, como si fuera un Goya, un cuadro manierista italiano, del siglo XVI, para financiar la compra de más droga.

Además, se supo que la organización pagaba a otros ciudadanos sudamericanos para que, mediante giros, remitiesen el dinero procedente del tráfico de drogas a Colombia.