Europa se queda sin sangre azul

INFORMATIVOS TELECINCO 19/06/2010 13:03

Parece mentira tanta obstinación, viviendo de él que hace cuarenta años se saltó las normas de la realeza para casarse con una azafata. Durante los Juegos Olímpicos de Munich de 1972, Carlos XVI Gustavo de Suecia conoció a Silvia Sommerlath, se enamoró, y ocultó su relación durante cuatro años. Su romance se oficializó en 1976. La boda de Victoria le puede servir de ensayo a los monarcas: su otra hija, Magdalena, ha estado relacionada con Erik Granath, un joven que ha pasado en arias ocasiones por comisaría, y su hijo, Carlos Felipe, sale con una concursante de reality shows, una relación no reconocida por sus padres.

La primera monarquía en sacar los pies del tiesto fue la monaguesca. Por mucho glamour que dé Hollywood lo que no da es sangre azul. La actriz Grace Kelly no la tenía pero eso no impidió que el 19 de abril de 1956, contrajese matrimonio con el Rey Raniero III de Mónaco. Los negocios inmobiliarios que compartían el monarca y el padre de Kelly favorecieron su aceptación. Sus hijas Estefanía y Carolina han seguido mezclándose con el pueblo. La primera, conocida como "la princesa rebelde", se casó en 1995 con su guardaespaldas, Daniel Ducruet, con quien ya había tenido dos hijos. Se separaron en 1996, volvió a dar a luz en 1998 -no se conoce la identidad del padre- y luego se la relacionó con el domador de circo Franco Knie. Todo ello contribuyó a que la relación con su padre fuese especialmente difícil. Carolina se casó tres veces: la primera con el playboy Philippe Junot, después con multimillonario italiano Stefano Casiraghi y, finalmente, con un 'sangre azul', el príncipe Ernst August de Hannover, duque de Brunswick y Luneburg.

En Holanda, varias bodas reales han causado alborotos políticos. El diplomático alemán Klaus Von Amsberg contrajo matrimonio con la Reina Beatriz de Holanda el 10 de marzo de 1966. La boda entre la princesa y el diplomático no fue bien vista por el fuerte sentimiento antigermánico de los holandeses tras la II Guerra Mundial. El 2 de febrero de 2002, su hijo, el príncipe Guillermo Nicolás, se casó con la joven argentina Máxima Zorreguieta. La relación no fue inicialmente bien vista por el pasado del padre de la joven, ministro durante la dictadura argentina del general Jorge Videla.

El Rey Harald V de Noruega conoció en una fiesta universitaria a Sonja Haraldsen, una burguesa que no contaba con la aprobación real para establecer un compromiso oficial. Fueron separados pero años más tarde volvieron a reunirse. Ante la insistencia del príncipe Harald, que llegó a amenazar con renunciar a sus derechos al trono si no podía casarse con Sonja, el rey Olav y el Parlamento noruego dieron finalmente el visto bueno a la boda, que tuvo lugar el 29 de agosto de 1968. Y la historia se repite el 25 de agosto de 2001 el hijo de ambos y heredero de la Corona, el príncipe Haakon, se casa con una plebeya, la popular Mette Marit Tjessem, que, además de no tener sangre real, es madre soltera, coqueteó con las drogas, y tuvo un marido que pasó por la cárcel.

Diana Spencer, luego Diana de Gales, contrajo matrimonio con Carlos de Inglaterra, heredero de la Corona Británica, el 29 de julio de 1981. Hija de padres divorciados, se ganó el cariño de la ciudadanía, que la apodó "la princesa del pueblo". Tras divorciarse, Carlos hizo pública su relación con Camila Parker-Bowles. Se casaron en 2005, y aunque ella pertenece a la aristocracia, no tenía títulos nobiliarios.

En dos ocasiones se casó el hijo menor de la Reina y Enrique de Dinamarca, Joaquín. Primero, el 18 de noviembre de 1995 con Alexandra Manley, una ciudadana británica de Hong Kong; luego, con Maria Cavallier, una francesa dedicada a la asesoría financiera. El hermano de Joaquín y príncipe heredero, Federico, contrajo matrimonio con Mary Donaldson, una abogada australiana, en mayo de 2004.

En España no escapamos a los matrimonios reales por amor. Doña Letizia Ortiz Rocasolano, Princesa de Asturias, contrajo matrimonio con el heredero de la corona de España, el Príncipe de Asturias Felipe de Borbón, el 22 de mayo de 2004. Periodista de profesión, anteriormente había estado casada con el escritor Alonso Guerrero, pero el matrimonio sólo duró un año. Sus padres también se divorciaron.

Esto es lo que ocurre aquí, en Esuropa, porque en Japón no se andan con chiquitas. La princesa Sayako fue borrada de la genealogía imperial tras casarse con un plebeyo.