Francisco Caamaño ha anunciado la regulación del uso del burka en los lugares públicos. El ministro de Justicia ha aclarado que sobre su posible prohibición en la nueva Ley "tendrán que decidir las Cortes Generales", aunque ha avanzado que el Ejecutivo es partidario de alguna restricción.
Caamaño ha afirmado que "hay elementos como el burka que son difícilmente compatibles con la dignidad del ser humano y sobre todo con elementos fundamentales en los espacios públicos como es la identificación". En este sentido, ha añadido que "lo coherente es que no existan prendas de esta naturaleza, que sean difícilmente compatibles con su utilización en las actividades o en escenarios públicos".
Precisamente el lunes los Ayuntamientos de Barcelona y Tarragona aprobaron la prohibición del uso del velo integral islámico (buka y niqab) en los espacios públicos. Tres de las cuatro capitales de provincias catalanas han prohibido su uso.
Desde la oposición, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, se ha mostrado a favor de prohibir el 'burka' en toda España apelando a "la igualdad entre hombres y mujeres" y a la "conquista de los derechos de la mujer" que, según ha recordado, ha costado "mucho conseguir".
"No soy partidaria del 'burka' y yo sí, yo lo prohibiría completamente", ha afirmado rotunda De Cospedal, para añadir que "no se puede ceder" ante ningún tipo de convención cultural, étnica o religiosa.
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Un tema menor
Por su parte, la nueva Defensora del Pueblo de Barcelona, Assumpció Vilà, ha considerado exagerado regular el uso del 'burka' en relación a las mujeres que lo utilizan en la capital catalana. "Se ha exagerado mucho. Estamos hablando de cuatro personas", ha declarado.
"Es un tema menor, en el sentido de que tengo entendido, porque lo pregunté, que hay cuatro personas que van con 'burka' en Barcelona", afirmó Vilà, e insistió en que cuatro personas sobre 1,7 millones de barceloneses supone un tema menor.
Sin embargo, defendió que "de la misma forma que un motorista no puede entrar en un sitio en casco, porque, si no, no distingues quién es, ni vamos por la calle con una media en la cabeza, llevar la cara tapada tiene el problema de no identificar a la persona". EBP/RSO