La Guardia Civil ha detenido en Melilla a dos individuos que supuestamente habían alquilado sendos coches de alquiler de alta gama en Almería y Alemania y que pretendían introducir en Marruecos para presuntamente robarlos. Los dos han sido detenidos por "apropiación indebida" en una práctica que consiste en alquilar legalmente los automóviles en Europa, introducirlos en Marruecos y posteriormente denunciarlos como robados en cualquier país europeo, con el fin de quedar exonerados de responsabilidad.
Según ha informado un portavoz de la 2006 Comandancia, los arrestos se han producido en el puerto de la ciudad española del Norte de África durante el control selectivo de vehículos que desembarcan de los buques procedentes de la península, para comprobar entre otros aspectos la titularidad y orden en la documentación de los mismos.
Así, según ha añadido, durante la cotejación de los papeles de un turismo marca Audi, modelo A3, con placas de nacionalidad alemana, ocupado por dos personas, comprobaron que el mismo era procedente de una empresa de alquiler de vehículos radicada en Alemania.
El portavoz ha explicado que el Instituto Armado realizó gestiones directas con dicha empresa, dando como resultado la expiración del contrato y el incumplimiento de sus condiciones, formulando por ello la empresa denuncia penal vía Internet y la Guardia Civil a la detención de sus ocupantes como supuestos autores de un delito de apropiación indebida de vehículos a motor.
El vehículo es completamente nuevo, tiene tan solo dos meses de antigüedad, y un valor de mercado de unos 30.000 euros.
Los detenidos, ambos varones, corresponden a las iniciales A.B. de nacionalidad marroquí y con domicilio en Holanda, de 42 años de edad, al que le consta a principios de este año la introducción en Marruecos de un vehículo con placas de nacionalidad francesa, posteriormente denunciado como robado y M.S., de nacionalidad holandesa y 31 años de edad.
El otro vehículo intervenido por la Guardia Civil es es un Wolkswagen, modelo Golf, con placas de matrícula nacional, alquilado hace unos días en una empresa de Almería, ocupado por una persona de nacionalidad británica.
La citada fuente ha detallado que los agentes realizaron las mismas gestiones con la empresa propietaria del automóvil, que certificó "el incumplimiento grave de las condiciones del contrato" y solicitando a la Guardia Civil la inmovilización inmediata del mismo. El vehículo al igual que el anterior nuevo, tiene un valor de mercado de unos 24.000 euros.
El portavoz policial ha destacado que "el modus operandi de este tipo de actuaciones es inequívoco, llegar a la Ciudad con la cobertura legal de un contrato de alquiler, para introducir los vehículos en Marruecos, y posteriormente presentar una denuncia por supuesto robo o sustracción en territorio comunitario, con objeto de quedar exonerados de cualquier tipo de responsabilidad penal".
Las empresas propietarias de los vehículos se han hecho cargo de los mismos y han agradecido el control realizado por la Guardia Civil para evitar la culminación de las acciones delictivas programadas.