Uno de los principales motores económicos de Aragón, la Opel de Figueruelas, que representa más del 20 por ciento del PIB de Aragón depende en gran medida de una negociación sobre el convenio que se sigue desarrollando contrarreloj bajo la amenaza de perder la producción del nuevo Corsa. Con ello, también podrían correr peligro miles de puestos de trabajo creados con la llegada de la factoría en los años 80. El plazo acaba mañana y todavía queda mucha negociación pendiente. Mientras tanto, esta mañana decenas de trabajadores han acudido a las puertas de la fábrica para protestar contra la actitud de la empresa y el sindicato.