El abogado de la mujer condenada a muerte por lapidación en Irán pedirá ayuda al Papa

"La semana que viene me entrevistaré con él", reveló a Efe Mostafaei, que tuvo que huir de su país después de que el caso de Sakineh adquiriera repercusión internacional y que actualmente está en Madrid invitado por la Asociación Libre de Abogados.

Preguntado sobre si piensa solicitar la mediación del Vaticano para evitar la ejecución de Ashtiani, el abogado, que actualmente vive exiliado en Noruega con su mujer y su hija, explicó que cuando una vida corre peligro hay que pedir toda la ayuda posible.

"Yo, en calidad de activista, he pedido ayuda y la seguiré pidiendo a varios organismos, incluso al Papa, con el que me entrevistaré la semana que viene para mejorar la situación de los derechos humanos en Irán", dijo.

Ashtiani, de 43 años y madre de dos hijos, fue condenada en 2006 a morir lapidada por mantener relaciones con dos hombres tras la muerte de su marido.

Posteriormente, fue acusada de ser cómplice en el asesinato de su esposo y nuevamente condenada a muerte, por lo que permanece en la cárcel en espera de la ejecución de la sentencia, aunque Irán ha negado que vaya a ser lapidada, alegando que, aunque el sistema judicial iraní contempla esa forma de castigo, ya no se aplica.

El abogado insistió en que "el de Sakineh es un caso determinado, pero hay muchos otros casos de lapidaciones y ejecuciones".

"Mi intención es acudir a distintas autoridades de la comunidad internacional para que tomen decisiones que mejoren la situación de otros víctimas también y se alcancen mayores libertades", añadió.

Entre las autoridades a la que piensa dirigirse incluyó al Gobierno español, tras asegurar que "España es uno de los países que nos ha ayudado mucho y estamos agradecidos".

De hecho, Mostafaei ha sido galardonado con el premio Derechos Humanos del Consejo General de la Abogacía Española, concedido también al otro abogado de Sakineh, Javid Hutan, actualmente encarcelado en Irán.

"Los premios que recibimos los luchadores por los derechos humanos son ayudas para las víctimas que están en las cárceles de Irán", aseguró.

Mostafei comentó que aunque mantiene contacto con Irán ha evitado comunicarse con su colega, encarcelado junto al hijo de Shakineh, "para no complicar su situación".

De hecho, explicó, ambos fueron detenidos junto a dos periodistas alemanes "después de que un grupo de la oposición que se autodenomina el partido comunista de Irán se pusiera en contacto con ellos desde fuera del país".

"Esas detenciones son consecuencia de las política autoritaria que lleva a cabo el Gobierno iraní para hacer callar las voces de los luchadores por los derechos humanos", añadió.

En este momento, Mostafaei prepara "una vida nueva" junto a su mujer y su hija en Noruega, pese a la "enorme tristeza" que siente.

"Tenía una buena vida, amaba mi trabaja y mi tierra natal. Es muy triste abandonarlo todo y sentirte desterrado", explicó.

Sobre Sakineh aseguró que espera que tenga "un futuro mejor y consiga su libertad. Ella, igual que otras muchas mujeres iraníes, es víctima de las leyes machistas que reinan en el país".