Dos activistas de Greenpeace, arrestados durante una protesta en una plataforma petrolera en el Ártico ruso

Reuters/EP 18/09/2013 16:16

Los activistas detenidos llegaron a la plataforma en el rompehielos de Greenpeace de nombre 'La sonrisa ártica'. Después de escalar a la plataforma, un barco de guardacostas lanzó algún disparo de advertencia para obligar al barco a retirarse de la base de la plataforma.

"Ante la negativa del capitán de 'La sonrisa ártica' a la petición para que detuviera su actividad ilegal, Rusia ha tomado la decisión de detener el barco. Los guardacostas se han visto obligados a lanzar disparos de advertencia en cuatro ocasiones desde un cañón de artillería a bordo de la embarcación", ha asegurado el Servicio de Seguridad Federal ruso, según declaraciones. Greenpeace, por su parte, ha asegurado que recibió las advertencias si no salían del área de forma inmediata.

El grupo activista ha asegurado que envió cinco barcos a la base de Prirazlomnaya, aunque no se tiene información sobre los otros cuatro.

La producción en la plataforma, propiedad del grupo estatal Gazprom y escenario del primer proyecto de Rusia en el mar de Barents, en el norte del país, estaba programada para comenzar en 2012. Sin embargo, una acción similar a esta provocó el retraso de la producción.

"A pesar de la fuerte financiación para el Prirazlomnaya, no está capacitada para garantizar la seguridad durante la extracción de petróleo segura", ha asegurado Greenpeace.

La perforación en tierra es una práctica habitual que, actualmente, cuenta con cierta estabilidad, sin embargo, no se ha trabajado en muchas ocasiones en el mar, a pesar de los numerosos intentos de hacer que funcione y de la relativamente poca profundidad de las aguas.

PETRÓLEO EN EL ÁRTICO

El Ártico contiene el 13 por ciento del petróleo mundial y el 30 por ciento del gas no descubiertos, según estimaciones de las industrias petroleras. Sin embargo, su viabilidad económica, así como sus credenciales de seguridad medioambiental siguen siendo materia de debate.

Los altos precios del petróleo, las pocas oportunidades de extracción, el riesgo político relativamente bajo y la reducción de la capa de hielo han conducido a numerosas empresas a buscar áreas sin explotar del Ártico durante los últimos años. Grandes empresas como ExxonMobil, Eni o Statoil han firmado acuerdos con la rusa Rosneft, de propiedad estatal, para entrar en la zona ártica de la costa de Rusia.

Muchos de estos proyectos deberían comenzar a extraer en la década de 2020, y están calificadas como cruciales para mantener la producción nacional rusa, la número uno en el mundo, de 10 millones de barriles diarios.

Los ambientalistas, preocupados por el impacto del frágil ecosistema y sobre cómo se pueden llevar a cabo las operaciones de limpieza en áreas tan remotas, han reforzado sus campañas a la vez que aumentan los intereses comerciales en el crudo.

La seguridad de la extracción en el agua es un tema que preocupa, especialmente, desde la explosión de unaa plataforma de BP en el golfo de México en 2010, en la que murieron 11 trabajadores, y que arrojó millones de barriles de petróleo al mar.

PLATAFORMA DE PRIRAZLOMNAYA

Prirazlomnaya, situado en una zona del mar de Barents a 60 kilómetros de la costa norte del país, es el primer proyecto en un yacimiento de petróleo en el mar que será desarrollado por Rusia.

Está programado que se empiece el proceso de extracción a finales de 2013, y se prevé que incremente la producción hasta 6 millones de toneladas anuales --120.000 barriles diarios-- en 2019. Para ello, la inversión de Gazprom será de alrededor de 200.000 millones de rublos --más de 4.600 millones de euros--, de los cuales ya han gastado la mitad.