Las activistas valencianas Marina Albiol --diputada de EUPV en las Corts-- y Carme Salavert, que han formado parte de la Segunda Flotilla de la Libertad, han regresado esta noche a casa con el "convencimiento" de recuperar el barco del Gerrnika, "seguir en la lucha" para "romper el bloqueo ilegal" que mantiene el Gobierno israelí sobre la franja de Gaza y "hacer llegar la ayuda humanitaria" al pueblo palestino de la zona.
Así lo han manifestado a su llegada al aeropuerto de Manises (Valencia), donde han sido recibidas por familiares, amigos y miembros de organizaciones sociales que les esperaban con banderas y una gran pancarta de 'solidaridad con Palestina', coreando lemas como "Todos somos Gaza", o "Palestina libertad".
Para la diputada de EUPV, estos quince días en la isla de Creta, donde el Gernika ha sido retenido por las autoridades griegas, han supuesto "una experiencia impresionante", pero ahora ha decido volver "para denunciar que desde la Unión Europea, desde el Estado español, el Gobierno griego e incluso Naciones Unidas han sido cómplices de Israel al impedir la salida de la Flotilla".
En declaraciones a los medios de comunicación, Albiol ha lamentado que, mientras el Gernika "se encuentra secuestrado por las autoridades griegas", el Gobierno español "no está haciendo absolutamente nada". Por ello, "diez compañeros permanecen encerrados en la embajada española en Atenas exigiendo que el Gobierno español interceda de forma inmediata".
Es un barco "de todos, que se compró con las aportaciones solidarias de miles de personas" y que ha confiado en que "se libere lo antes posible para poder reemprender esta Segunda Flotilla", una "iniciativa pacífica y civil", ha recordado Albiol, "que lo único que pretende es llevar ayuda humanitaria, romper el bloqueo y concienciar a todo el mundo de la causa del pueblo palestino". "Tenemos que continuar trabajando por una Palestina libre", ha animado.
No obstante, a pesar de tener "todos los papeles en regla, todos los permisos y el plan de viaje presentado", el Gernika sigue escoltado por fragatas militares que impiden moverlo "ni siquiera hacia el estado español para que quede en casa". "Queremos recuperar el barco porque será el barco que vaya a Gaza, si ahora no ha sido posible, en unas semanas, en unos meses, pero no abandonamos la idea de que tenemos que romper ese bloqueo ilegal e injusto. Ellos tienen el dinero y el poder pero nosotros tenemos el convencimiento de estar defendiendo una causa justa", ha sentenciado.
Por su parte, Carme Salavert, miembro de CEDSALA, ha manifestado que la experiencia de estos días "ha tenido de todo" y pese a no haber podido zarpar, "el objetivo de denuncia" para que "se supiera lo que está ocurriendo en la franja de Gaza" se ha "cumplido" la movilización de la gente ha sido muy importante".
La activista ha asegurado que "la Segunda Flotilla aun sigue y después vendrá una tercera". "La esperanza es seguir en la lucha y si ahora no ha podido ya será", ha apostillado.
En este sentido, ha explicado que parte del contingente español se ha quedado vigilando el barco y otros, como ella y Albiol, han regresado "porque pensamos que era importante esta denuncia trasladarla también aquí antes de que todo se apague, de que todos se vayan de vacaciones y entonces se quede todo igual".
Salavert criticado que el "Estado español ha sido cómplice" de lo ocurrido. Según ha apuntado, "el que ha puesto la cara del malo es el griego, pero desde luego la Comunidad Europea y el Gobierno español también son rehenes del gobierno sionista, por eso fuimos a la embajada española", donde "el trato ha estado bien pero tampoco dan ninguna solución", ha lamentado.
Asimismo, ha querido "diferenciar entre el pueblo griego y el Gobierno griego porque el pueblo sí que está con Palestina y el Gobierno no", ha concluido.