La joven de 14 años falleció el pasado mes de octubre y ya es la "paciente 143" en un tanque de criogenización en un Instituto especializado en esa técnica, en Michigan, EEUU, adonde fue trasladado su cuerpo.
La adolescente, que no puede ser identificada, expresó su deseo de "no morir " y de utilizar este procedimiento para un día "despertar curada", según publicó el Daily Mail.
La joven escribió una carta al juez en la que dejó plasmado lo que quería: "Quiero vivir y vivir mucho y creo que en el futuro se podrá encontrar una cura para el cáncer y yo podré despertar. Quiero tener esta oportunidad. Este es mi deseo '. Creo que ser criogenizada me dará la oportunidad de despertar curada, en incluso en cientos de años. No quiero ser enterrada bajo tierra ."
Sus padres divorciados también estaban enfrentados por la voluntad de su hija. La madre apoyaba a la joven, mientras su padre, que no la veía desde hacia años, se negaba, debido a las 37.000 libras de esterlinas que cuesta someterse a la criogenización.
El juez británico Peter Jackson, que fue a visitar a la demandante al hospital poco antes de su fallecimiento, ha decidido acceder a su deseo y que muriera en paz.
El cuerpo de la joven finalmente ya ha sido traslado al Centro de criogenización, donde permanece congelado a -196 ºC.
Esta técnica es rechazada por numerosos científicos debido a que hasta el momento no ha sido factible volver a la vida a un mamífero congelado por este procedimiento.