En octubre de 2014, Megan Jordan sufrió un grave accidente de tráfico que desembocó en un síndrome de dolor regional complejo en su pierna izquierda (SDRC por sus siglas en inglés). Desde entonces su extremidad quedó completamente paralizada y la joven vive pegada a una silla de ruedas que le impide hacer su vida normal, según informa Metro.uk.
Cuatro años después de accidente, Megan asegura que sigue sintiendo fuertes dolores en la articulación afectada, por lo que ha pedido en varias ocasiones a los médicos que le amputen la pierna. De esta manera, la adolescente afirma que se sentirá mejor y podrá comenzar de nuevo a vivir con la ayuda de una nueva silla de ruedas especial para su condición. "Es mi cuerpo y si quiero amputarme la pierna, se me permitirá ingresar en el hospital", sostiene la adolescente.
Pero según sostiene el medio, los médicos ya han advertido a Megan de que el dolor está en su cabeza, y que a pesar de la parálisis que sufre, su pierna está "sana". Por ello, se han negado ha intervenir a la joven.
A pesar de las advertencias de los sanitarios, la joven ha habilitado una página de recaudación de fondos a través de Internet mediante la cual pretende conseguir el dinero necesario para comprar la silla de ruedas especial.
Según explica dicha página, el SDRC se produce después de una lesión en los nervios y "se conoce como la condición intensamente dolorosa"."El dolor que experimento es insoportable, y creo que tenerlo amputado será la única forma de detener el dolor", lamenta Megan.