Alberto de Mónaco ya tiene a su princesa azul

EUROPA PRESS 01/07/2011 19:04

Charlene Wittstock ya es Su Alteza Seerenísima la princesa Charlene de Mónaco. La ex nadadora sudafricana y el Príncipe Alberto se han dado el 'sí quiero' este viernes por la tarde en una ceremonia celebrada en Montecarlo.

El secreto mejor guardado de toda boda, el vestido de la novia, ha sido revelado con rigurosa puntualidad. A las cinco de la tarde, hora fijada para el enlace civil, la Princesa Charlene ha llegado a la Salón del Trono del Palacio Grimaldi luciendo un sorprendente traje pantalón de gasa de color azul aguamarina.

La nueva Princesa de Mónaco ha acompañado su atuendo de un cuerpo de encaje y una chaqueta del mismo tono de manga larga. El peinado de la sudafricana también ha brillado por su elegancia y sencillez ya que ha consistido en un discreto recogido acabado en un moño bajo.

Aunque se rumoreaba que la Princesa Charlene podría haber escogido a Karl Lagerfeld para crear el vestido de esta ceremonia civil, según la publicación franceca 'Le Figaro', el traje podría haber sido diseñado por ella misma.

El novio ha esperado a Charlene Wittstock en el Salón Grimaldi donde, contrariando todas las tradiciones, ella ha sido la primera en dar el 'si quiero'. En ese momento Charlene, la ex nadadora, se ha convertido en Su Serenísima Alteza de Mónaco.

La ceremonia ha sido conducida por Philippe Narmino, el presidente del Consejo de Estado de Mónaco, que ha hablado, primero en francés y después en inglés, de la "alegría" de celebrar esta unión. "África y Europa se han juntado en vuestros corazones. Te has casado con un Príncipe, pero también con un país", recalcó Narmino a Charlene.

LA FAMILIA REAL MONEGASCA

Como cabía esperar, la familia Real más glamourosa del mundo no ha defraudado, especialmente Carolina que ha vuelto a dar una lección de estilo y elegancia en Montecarlo. La hermana mayor del Príncipe Alberto ha sorprendido a todos con un exquisito vestido azulón y una estupenda pamela de rafia con adornos florales.

Junto a Carolina, y muy emocionada durante la boda civil, su hermana Estefanía, que se ha decantado por un vestido de raso en un tono visón. Y junto a ellas, cómo no, todos sus hijos: Andrea, Carlota y Pierre Casiraghi junto a su hermana pequeña, Alejandra, por parte de Carolina; y Luis, Paulina y Camila de Estefanía.

Carlota también se ha sumado al color del día y ha escogido para la boda civil de su tío un traje en tonos aguamarina que conjuntaba con una bonita pamela con un ribete de tela del mismo color del vestido.

Sólo unas 80 personas han acudido a la ceremonia en la Sala del trono de Palacio, entre ellas miembros del gobierno, el presidente del Consejo Nacional y los embajadores de Francia y Sudáfrica. Después del enlace llegaba el momento estrella: la aparición en el balcón.

Los nuevos esposos no han defraudado y han regalado a todos los presentes en la plaza del palacio el esperado beso que confirmaba su recién estrenado matrimonio.