Como miembro de Eurogroup for Animals, ANDA asegura que en la mayoría de Estados miembro de la UE, se sigue cortando el rabo y recortando los dientes de los lechones, lo que vulnera las leyes vigentes en la UE, que exige que los granjeros aborden las condiciones ambientales y los cambios en los sistemas de manejo adecuados antes de recurrir a estas "dolorosas prácticas".
Según datos de la organización, la castración quirúrgica de lechones sin (o con inadecuada) anestesia sigue siendo común en Europa y afecta a 77 millones de animales cada año (en España esta práctica cruel solo afecta a los animales dedicados a la producción de jamón, un 20%). Se realiza para evitar un posible olor desagradable en la carne. Según la organización, en la actualidad existen métodos de castración alternativos e indoloros o es posible criar a los cerdos sin castrarlos cambiando los procedimientos actuales.
Por ello, propone una hoja de ruta para acabar con los métodos tradicionales de castración de lechones en la UE, con un horizonte del 2024.
Para el portavoz de ANDA, Alberto Díez, los procedimientos de cría "dolorosos" como la castración, y el corte de rabos son "inherentes a la cría de cerdos de hoy en día, pero son completamente innecesarios".
Asimismo, apunta que existen alternativas técnicamente y económicamente viables y ahora deben ser integradas tanto en la legislación como en las prácticas de los ganaderos.
"Es muy significativo de la dejadez de las distintas administraciones que prácticas rutinarias como el recorte de rabos y dientes estén prohibidas desde hace tanto tiempo y se sigan realizando sin ningún problema", ha denunciado.