Antes de que tuviera lugar el suceso, Holli Jeffcoat, quien tenía una edad mental de siete años, acudió a la comisaría de Lubbock County (Texas) para avisar a las autoridades de que su padrastro había estado abusando de ella durante más de 10 años. Además, la joven añadió que sospechaba que estaba embarazada, ya que el marido de su madre había intentado realizarle un aborto usando una percha. “Ella no quería ir a casa porque no quería tener sexo” explicaba uno de los policías al diario ‘The Sun’.
Su padrastro, James Holland, tenía antecedentes de violación y, en cuanto a la madre de la joven, Debby Holland, aseguró que no sabía nada sobre el abuso sexual, aunque se cree que podría haber ayudado a su marido a cometer el crimen.