El relato de un asesinato: A Juan Manuel lo golpearon, atropellaron y quemaron

El cadáver de Juan Manuel Rodríguez, de 34 años, apareció carbonizado en la parte trasera de un coche en un descampado de La Puebla, Murcia, el pasado mes de agosto. Horas después la Guardia Civil detuvo a una pareja: Agustín M.A., de 24 años, y su novia, Natalia M.R., de 18 años. Ella había tenido una relación sentimental con la víctima, que había terminado meses atrás.

En la declaración de los detenidos ante la Guardia Civil, Natalia, vecina de Torre Pacheco, admite que “le dije que lo iba a matar y a quemar, que lo iba a quemar a él y a su hija. Y él me dijo que me fuera para La Puebla, que me esperaba con una escopeta”.

Juan Manuel y su ex seguían manteniendo el contacto a pesar de haber roto la relación y de que siempre acaban discutiendo. Agustín, pareja actual de Natalia, no se llevaba bien con la víctima, según informa La Verdad sobre todo por los celos. De hecho, ella lo había denunciado por malos tratos y la justicia le había impuesto una orden de alejamiento. Pero volvieron.

Una tarde de domingo, Natalia despareció y Agustín fue a buscarla a casa de Juan Manuel. Ella lo había llamado para quedar. Al no encontrarlos en casa de él, Agustín se dirigió al paraje de Los Maínes, donde ambos habían quedado otras veces. El acusado niega, según el citado diario, que le prepararan una emboscada a la víctima.

En el descampado ambos se enzarzaron en una pelea y Agustín le golpeó en la cabeza a Juan Manuel con una llave inglesa, según su relato a los investigadores. No obstante, estos barajan la posibilidad de que el detenido le golpeara sin mediar palabra.

Al ver la sangre, los detenidos y la víctima se montaron en el coche para llevar al médico a Juan Manuel. Sin embargo, a Agustín le dio miedo por las consecuencias penales. Una vez parado el coche que llevaba la mujer, los dos la emprendieron a golpes de nuevo.

Con la víctima aturdida, los agresores se montaron en el vehículo y huyeron, con tan mala suerte, según la declaración de Natalia, que se llevó por delante a su ex porque no lo vio debido a la oscuridad.

En ese momento, montaron a la víctima de nuevo en el coche. “No lo llevamos a urgencias porque Agustín no quería”, ha declarado ella. Una vez muerto, volvieron al paraje Los Maínes y le prendieron fuego al coche.

Llegados a este punto la pareja de acusados discrepa. Ella dice que la idea de quemar el coche con la víctima dentro fue de él y él que de ambos. Aunque, Agustín admite que fue él quien cogió una bolsa de plástico y le prendió fuego dentro del vehículo.