La Agencia Peruana de Cooperación Internacional (APCI), organismo encargado de controlar a las instituciones de cooperación a nivel nacional, confirmó hoy a Efe que Señor de Huanca no aparece en sus registros.
Los españoles ya habían sido advertidos de este hecho por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), en un correo enviado el pasado 30 de junio.
Cuatro de los españoles -Sergio Serra, Silvia Albert, Alan Santonja y María José Such- firmaban un correo electrónico enviado a la oficina de AECID en Lima el 28 de junio, sólo tres días antes de su viaje, y solicitaban información sobre la "fiabilidad" de la asociación antes de emprender su misión, en la que transportaban una cantidad indeterminada de ropa, material escolar y medicinas.
"Hemos conocido esta ONG a través de otros españoles que han colaborado con ellos y Marco, el responsable, parece una persona muy comprometida", señala el mensaje de los españoles, al que tuvo acceso Efe.
Responsables de AECID respondieron al mensaje el día 30 notificándoles que no disponían de información sobre la referida asociación, y les advirtieron de que "en el registro de ONGs de la Agencia Peruana de Cooperación Internacional no aparece registrada ninguna con ese nombre".
Las asociaciones que no se inscriben no pueden obtener cooperación internacional por vías formales, según explicaron fuentes de APCI a Efe.
Las mismas fuentes añadieron que Señor de Huanca ni siquiera aparece en el registro de la Superintendencia de Administración Tributaria (SUNAT), aunque esto es posible si se trata de una "asociación sin fines de lucro".
Para ser reconocidas y recibir cooperación oficial, una Organización no Gubernamental tiene que presentar su proyecto y acta de constitución, así como otros documentos ante los registros públicos, que luego son evaluados por la APCI, que actualmente tiene 900 ONGs inscritas.
La Asociación Señor de Huanca no respondió durante todo el día de hoy a las llamadas de teléfono realizadas por la Agencia Efe.
Los cuatro firmantes de aquella carta, junto a cinco españoles más, viajaron a Perú el 1 de julio y se dirigieron a Cuzco, región donde se ubica el poblado de Qenco en el que iban a distribuir su material humanitario.
Los nueve se alojaban con familias de Qenco durante el tiempo que durase su cooperación en proyectos de higiene, educación y rehabilitación de viviendas, según explicaban en su carta.
En la tarde del martes, todo el grupo regresaba a Cuzco "para comprar material y provisiones" -dijo hoy Serra a Efe- cuando la camioneta en que viajaban se salió de la pista de tierra y se precipitó por un barranco de 300 metros de profundidad.
Cuatro de las integrantes del grupo -Lorena Guerrero, Soraya Macías, María José Such y Lidia Monjas- murieron en el acto, mientras que los demás resultaron heridos, uno de los cuales, Alan Sandoja, se encuentra con pronóstico reservado con traumatismo en la base del cráneo.