Los médicos dijeron a los padres que se despidieran de su primer hijo ya que la esperanza de vida era mínima.
La madre contaba a Dailymail, como el bebé de diez meses quedó paralizado y fue conectado temporalmente a un ventilador poco después de contraer la grave enfermedad.
Pero ahora sólo le queda una revisión y será dado de alta la próxima semana, sólo dos meses después de la fatídica noche del 4 al 5 de Julio.
La madre natural de Sheffield, en South Yorkshire declaró: "Todo iba bien. No hubo complicaciones durante el embarazo y él nació sano. Estábamos aprendiendo a ser padres".
"Era domingo por la noche y lo acostamos como de costumbre y estaba bien. Pero después cuando se despertó sobre las 4.30 a.m. estaba empapado en sudor y estaba ardiendo, pero a la vez temblaba".
"Yo estaba muerta de miedo y enseguida lo llevamos al hospital. No sabíamos que pensar, sólo que tenían que atenderle lo antes posible".
Durante las horas siguientes comenzaron a salirle manchas por el cuerpo y le llevaron a la unidad de cuidados intensivos del hospital infantil de Sheffield y dejó de reaccionar.
Los doctores les dijeron a los padres de Ivan que la situación era crítica y que no estaban seguros de que sobreviviera a esa noche.
Después de esto, el pequeño sufrió siete paros cardiacos en un periodo de ocho horas, pero se fue reponiendo cada vez, por lo que los médicos continuaron administrándole oxígeno y respiración cardiopulmonar.
La madre comentaba: "Fue un rato horrible, las horas más largas que he vivido. Es difícil resumirlo y explicar como me sentí".
"Los médicos nos dijeron que lo más probable es que no pudiera superarlo, pero ellos y el niño continuaron luchando. Le perdimos durante doce minutos en uno de sus ataques cardiacos, pero increíblemente también se recuperó de aquello".
Tras eso le pusieron respiración artificial y estuvo en cuidados intensivos los siete días posteriores.
La madre añadió: "Nos advirtieron que lo peor podía pasar, y francamente no pensamos que saldría adelante".
"Fue el mejor sentimiento del mundo cuando empezó a mostrar signos de poder respirar por sí mismo, el personal del hospital estaba alucinado de cómo se estaba reponiendo, y dijeron que era un milagro".
Desde que salió del hospital, Iván ha evolucionado muy positivamente, y ha vuelto a su vida normal como un niño activo.
Para dar las gracias al hospital infantil, los padres han organizado un acto benéfico en su bar para recaudar fondos.