Bruselas critica que el 50% de las multas de tráfico por infracciones en otros países de la UE no se cobran

EUROPA PRESS 29/11/2016 15:29

El sistema de información electrónico en vigor garantiza el intercambio "rápido, seguro y confidencial" de los datos de matriculación del vehículo infractor entre los países y "ha tenido un impacto positivo para aplicar las sanciones transfronterizas", según explica en su informe de evaluación de la directiva europea de la directiva de 2015 que facilita la cooperación policial y el intercambio de información sobre las ofensas de tráfico.

Así, el número de investigaciones de ofensas de tráfico cometidas por ciudadanos no residentes en otros Estados miembro "cuatro veces" entre 2013 y 2015 en los países que aplican la directiva, asegura en su informe. Reino Unido, Irlanda y Dinamarca son los países que no están obligados a aplicarla, aunque tienen de plazo hasta mayo de 2017 para sumarse si quieren al sistema.

"Sin embargo el sistema no se ha utilizado para aprovechar su pleno potencial", avisa el Ejecutivo comunitario. También precisa que "aproximadamente el 50% de las infracciones de tráfico detectadas" en otros países de la UE "no se investigaron en 2015" y "aproximadamente el 50% de las sanciones" no se han aplicado por la falta de cooperación y asistencia mutua entre países o porque las decisiones judiciales adoptadas en los Estados miembro en casos de impago de las multas no caen dentro de la aplicación de la decisión comunitaria de 2005.

"Hay una necesidad clara de que los Estados miembro exploten mejor el potencial del sistema para investigar más activamente las infracciones de tráfico cometidas por no residentes", ha concluido el Ejecutivo comunitario en su informe. En él, constata que "también hay potencial para reforzar la aplicación de las sanciones por ofensas de tráfico investigadas".

Las decisiones sobre multas emitidas por otros Estados miembro sólo se pueden reconocer en la actualidad si las infracciones de tráfico se califican como ofensas penales o si se revisan en el marco de un procedimiento similar al penal. Según señalan, "parece que todavía hay incertidumbre legal que dificulta a las autoridades administrativas de los Estados miembro" evaluar si las decisiones en otros países las han tomado tribunales "con jurisdicción en asuntos criminales" o tribunales administrativos que han revisado la ofensa con un procedimiento "similar" al penal.

El Ejecutivo comunitario también ha defendido la posibilidad de incluir en la directiva otras ofensas no cubiertas actualmente como no mantener una distancia de seguridad suficiente respecto al vehículo que va delante, los adelantamientos peligrosos e, incluso, el aparcamiento peligroso o el impago de peajes debido a la mayor utilización de los equipos de control automáticos.

La directiva cubre en la actualidad las ocho ofensas más frecuentes, entre ellas, superar el límite de velocidad, no ponerse el cinturón, conducir ebrio, por utilizar teléfonos u otros dispositivos por el riego de distracción.

El coste de las infracciones cometidas cubiertas por la directiva actual se eleva a unos 10 millones de euros en 2014 ya sea por ciudadanos no residentes o vehículos con matriculación extranjera.

De momento, el Ejecutivo comunitario no ve "necesario" armonizar las normas de tráfico a nivel de la UE para "mejorar la eficacia" de la directiva, ni tampoco por ahora los métodos para detectar las ofensas por superar la velocidad en los diferentes Estados miembro. A su juicio, "no hay pruebas de un impacto significativo para la seguridad vial o la aplicación de las sanciones transfronterizas" y se vería como "una interferencia injustificada" en la elección de los países.