El responsable de la sección de trasplantes del Hospital de Bellvitge, José Maria Cruzado, ha atribuido este progreso al "aumento en la donación de vivo, la mejor gestión de donantes potenciales y los avances técnicos".
En 2012, Cataluña registró un 26% de trasplantes renales de donante vivo: "La donación en vivo es la mejor opción para un enfermo en espera de trasplante renal" porque permite hacer el trasplante antes del inicio del tratamiento renal sustitutivo, con lo que se obtienen mejores resultados y el receptor gana calidad de vida.
Precisamente, el Hospital de Bellvitge se encuentra entre los centros líderes en España en trasplante de riñón, con una tasa de 77 por millón de población (pmp), cuando la media española se encuentra en 54 pmp.
El hospital realizó un 19% de trasplantes con donantes vivos en 2012, cifra que ha crecido este 2013, cuando hasta junio se había llegado al 26%.
Uno de los avances logrados fue descubrir que los riñones considerados aptos sólo en trasplantes dobles --dos riñones del mismo receptor-- también eran válidos para trasplantes simples.
Esta investigación ha permitido realizar más trasplantes simples y menos dobles, de manera que con el mismo número de órganos donados se consiguen hacer más trasplantes.