Tras conocer el informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) favorable a la reapertura de la Central Nuclear de Garoña, CCOO Euskadi ha pedido "el cese inmediato sobre todas las especulaciones en torno a su posible reapertura".
Según ha recordado, la central nuclear "ha superado con creces su período de vida útil de 40 años, ya que está punto de cumplir 46, y supone un peligro para el entorno y un aumento de los residuos nucleares para los que no existe tratamiento alguno".
El sindicato ha señalado que "la incertidumbre provocada en relación a la posible reapertura está paralizando las posibilidades de reactivar el plan de dinamización económica para la zona de influencia de la central que se aprobó en 2009, pero que fue interrumpido por el Gobierno de Rajoy en 2012", hecho "especialmente grave" para CC.OO. de Euskadi.
El sindicato ha considerado que las "maniobras" que ha realizado el CSN para "alargar la vida de las nucleares no ayuda a establecer un calendario de cierre de los reactores nucleares como han aprobado otros países como Alemania, Bélgica, Suiza o incluso parcialmente la nuclearizada Francia, y sólo beneficia a los intereses de las eléctricas propietarias de las centrales, que quieren alargar su vida útil".
El CSN, "en el que hay mayoría de miembros nombrados por el PP, aprobó en su día desvincular la renovación de las licencias de explotación de las centrales de las revisiones periódicas de seguridad que realizan los inspectores y ahora aprueba el informe para el alargamiento de la vida de Garoña", ha criticado.
Según el sindicato, "la supresión del horizonte temporal en la concesión de los permisos podría suponer seguir operando con revisiones cada 10 años, pero sin renovación del permiso". Este cambio, ha dicho, "podría abrir la posibilidad de reclamación de las eléctricas por lucro cesante si algún Gobierno decidiera cerrar alguna central concreta". No obstante, recuerda que el informe "no es vinculante para el Ministerio de Energía, que tendría la última palabra respecto de su prórroga".
PLAN DE REACTIVACIÓN
CCOO Euskadi cree que la zona donde se ubica la central de Garoña "debería haber contado con un plan de reactivación más estable y prolongado que garantizase que en la zona se pusiesen en pie actividades alternativas para preservar la actividad económica y el empleo de forma sostenible".
En ese sentido, ha indicado que el plan aprobado por el Gobierno del PSOE en 2009 establecía ayudas para la creación de empresas y para la reactivación económica de unos 100 millones de euros para el periodo 2010-2013, "y funcionó en 2010, poniendo en marcha 37 proyectos, y en 2011, con otros 17 proyectos, pero el nuevo Gobierno del PP paralizó los fondos para 2012, interrumpiendo así las inversiones y dejando inacabado un proceso que había levantado expectativas de creación de empleo en la zona".