Un colegio prohíbe la entrada a casi 200 chicas por llevar la falda demasiado corta

Informativos Telecinco 05/01/2017 09:04

A casi dos centenares de chicas le han prohibido la entrada a un colegio británico por llevar puesta una falda demasiado corta.

La política de la Ebbsfleet Academy, situada en Kent, al sureste de Londres, es muy estricta, y establece que las chicas pueden llevar una falda azul marino "de una longitud adecuada para la escuela, es decir, no más de 5 cm por encima de la rodilla".

La directora del centro, Alison Colwell, ha sido criticada por enviar a casa al 5% de sus alumnos en un solo día por el incumplimiento de la norma sobre uniformes aprobada en 2013, según señala el Daily News.

Kim O'Brien, una madre de las chicas rechazadas, publicó en Facebook la historia que le había ocurrido a su hija, de 15 años, que se tuvo que dar la vuelta cuando llegó al colegio junto con otras 200 chicas, ya que no le permitieron incorporarse a las clases.

"La escuela envió cartas a las casas de los estudiantes antes de Navidad pidiéndonos que comprobásemos que las faldas de nuestras hijas no se situaban más de 5 cm por encima de la rodilla", señaló la mujer. "Mi hija se presentó hoy a la escuela con su falda, y nunca había tenido problema para entrar. No hay nada malo con su falda, tiene la longitud correcta. Cuando llamé a la escuela, me dijeron que le habían dado una carta en la que señalaba cómo se podía entrar en la escuela y que debía cambiar su falda, pero la dejaron fuera".

O'Brien señala que cree que es peligroso dejar a los niños vagando por las calles, y que es su labor cuidar de los niños vulnerables, sobre todo, aquellos a los que no tienen otro lugar a donde ir. "Están cerrando las puertas en las narices a varios alumnos por razones tontas. Estoy muy enojada, la escuela es un lugar donde los niños deben ser capaces de sentirse seguros. Hay niños muy vulnerables, que incluso no tienen calefacción en sus casas, y ahora la escuela los trata como si fueran basura".

La escuela ya fue criticada a principios de septiembre por enviar a casa a un porcentaje de alumnos ya que no cumplían las normas sobre cómo debían llevar las cejas o sobre el uso de los colores en los zapatos.