Según ha informado este lunes el Instituto Armado, durante un control fiscal en el comercio el 7 de enero, detectaron que estaba comercializando medicamentos y alimentos procedentes de China y no autorizados en España, además de alcoholes por los que no se había abonado el impuesto especial.
Para evitar que los policías levantaran acta por las irregularidades, el detenido les puso sobre la mesa una bolsa con 7.000 euros en metálico y se la ofreció si no le denunciaban, aunque finalmente quedó detenido por un delito de cohecho y se le incautó el dinero.