Dustin Melvin Davison, de 25 años, ha sido condenado a pena de muerte por el asesinato de Kreedin Paul Brooks, el hijo de dos años de su exnovia. Según explica People, el jurado ha elegido esta fuerte condena debido a que el asesino del niño actuó con una extrema crueldad.
La terrible paliza tuvo lugar el 18 de mayo de 2015 y fue el mismo Davison quien alertó a emergencias para informar de que el niño estaba inconsciente. Tal y como explicó en esa llamada, él estaba al cuidado del niño mientras que su madre estaba trabajando, a pesar de que ya no eran pareja. Tras esto, alegó que "el niño se golpeó la cabeza con la mesa" a la vez que añadió, desesperado, que "me estoy volviendo loco, yo estaba en la ducha y no me he enterado de nada".
Las autoridades descubrieron que el niño había muerto por una fractura de cráneo que había producido una hemorragia cerebral y que, además, presentaba múltiples contusiones por todo el cuerpo, procedentes, probablemente, de una brutal paliza.
En los interrogatorios que le hicieron a Davison, él cambió varias veces su versión de la historia, incluso llegando a decir que el niño se hizo daño durante una pelea de almohadas o que fue un amigo quien pegó al niño hasta provocarle la muerte.
Tal y como explican los informes de su caso, la defensa de Davison argumentó que el hombre no podía ser juzgado debido a que "había hecho declaraciones delirantes", aunque el juez no lo aceptó.
Ahora, tres años después, Davison ha sido condenado a pena de muerte.