La familia de la fallecida tras sufrir un ictus en Lepe denuncia ante el Defensor del Paciente la tardanza de la ambulancia

Informativos Telecinco / Agencias 10/09/2018 21:23

Según la carta remitida a los medios por el Defensor del Paciente, los familiares se percataron de que a la víctima le sucedía algo raro porque “no podía hablar, se le trababa la lengua, arrastraba una pierna y no podía caminar”.

Fue entonces cuando, sobre las 9.00 horas del pasado 14 de agosto, llamaron al 061 para pedir una ambulancia, explicando en tal llamada que creían que estaba sufriendo un “ictus”, según explican.

Sin embargo, la primera ambulancia “llegó a las 11:20 horas, y solo con un técnico conductor”, según relata la hermana de la víctima.

“Empezó a realizarle unas preguntas de rutina a las que ella contestó bien, aunque con la lengua enrollada" y es el mismo técnico el que "se dio cuenta de lo que le había pasado, por lo que comenzó él también a llamar al 061 para que viniesen a recogerla, ya que él venía solo, sin médico ni enfermero", cuenta.

Tras bajarla en una silla hasta la ambulancia entre el técnico y sus familiares, el 061 fue avisado nuevamente para comprobar por dónde venía, y la persona que atendió a esta llamada le dijo que "ya venía la ambulancia para atender a la señora del desvanecimiento", a lo que la hermana respondió que "le había dado algo más fuerte, como un ictus, y que no era normal lo que estaban tardando".

Unos minutos después llegó 061 y hablaron con el técnico de la primera ambulancia, donde la examinaron y decidieron que siguiese el camino hacia el Hospital Infanta Elena pero "sin la compañía de ningún facultativo, sino con el técnico que conducía”, además de con su marido.

NO ESTABA ACTIVADO EL CÓDIGO DEL ICTUS

Además, cuando llegaron al hospital, según asegura la familia, “tampoco estaba activado Código Ictus, y fue el técnico de la ambulancia quien lo advirtió a los médicos de urgencias”.

Además, indican, tras hacerle un TAC les informaron de que iban a trasladar a la mujer al Hospital Virgen del Rocío porque "necesitaba estar en la unidad de ictus".

Sobre las 15:00 horas llegaron a Sevilla y "la ambulancia de pacientes críticos llegó al hospital a las 16,00 horas, de la que salió” la víctima “toda entubada y llena de aparatos de respiración".

Preguntando nuevamente por la tardanza, los técnicos le dijeron a la hermana de la ahora fallecida que “la paciente no venía preparada de Huelva, que venía atrasada y que había tenido una parada cardiopulmonar de 12 minutos".

Después de que la neuróloga les confirmase que la situación era muy difícil, procdedieron a operarla y tras cuatro horas de intervención fue trasladada a la UCI. Pasadas las 48 horas “confirmaron que ya el cerebro estaba sin actividad, falleciendo el 22 de agosto”.

RECLAMAN RESPONSABILIDADES

Así mismo, al finalizar la misiva al Defensor del Paciente, Blanca Morales, hermana de la fallecida, asegura: “Voy a intentar, me cueste lo que me cueste, averiguar y confirmar que la falta de atención y coordinación en la primeras horas de atención a mi hermana fueron determinantes en su evolución y su fallecimiento".

A este respecto, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPS) ya ha anunciado que llevará a cabo una “investigación más detallada” a la que se ha realizado hasta el momento con el fin de analizar “todas las llamadas y procedimientos llevados a cabo”.