De esta manera, el Centro Coordinador de Emergencias de Seguridad (Cecoes) recibió un aviso de un particular informando que el suelo de su domicilio se estaba hundiendo.
Así, se trasladaron al lugar efectivos de Bomberos de la capital, además un vehículo de atención médica del Servicio de Urgencias Canario (SUC), efectivos policiales y técnicos del Ayuntamiento.
Las mismas fuentes señalaron que el origen del hundimiento son unas humedades existentes en las vigas base de inmueble, por lo que los vecinos no van a poder regresar a sus domicilios por el riesgo de derrumbe.
Pese a esto, a las 11.30 de este sábado se dictaminará si los afectados pueden subir a sus domicilios momentáneamente para recoger enseres.
Mientras, todos los vecinos desalojados se encuentran en viviendas de familiares, menos una pareja que se quedó durante la noche en el albergue insular.