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La búsqueda de Natalia no cesa. La Fiscalía de París ha abierto ya una investigación por la desaparición de la universitaria española. En las últimas horas se ha inspeccionado la vivienda a la que nunca regresó. No se sabe nada de ella desde hace una semana.
La española de Erasmus en París se sentía perseguida y observada. Se lo advirtió a familiares y amigos el último mes. Pero nadie tomó en serio sus temores por ser muy miedosa.
El 1 de mayo desaparece y 6 días después encuentran su mochila. Dentro, ordenador y móvil en un parque junto a la Universidad de la Sorbona.
A Natalia de 22 años sólo le faltaban dos semanas para volver a Barcelona. Allí estudiaba antes de irse de Erasmus.
La joven mide 1,62 centímetros de estatura, es de complexión media, piel morena, pelo largo castaño y tiene un pendiente en la nariz.
La mañana de su desaparición estaba trasladando sus maletas al piso de una amiga española, pues se acababa su contrato en el piso en el que había vivido hasta entonces, en el distrito 14, al sur de París.
Natalia dejó dos maletas en la casa de su amiga y le dijo que regresaba para recuperar una tercera y que volvería más tarde para estudiar juntas, ya que está en mitad de sus exámenes finales. Nunca volvió.