Despierta del coma y oye a sus médicos predecir su muerte

Informativos Telecinco 29/04/2016 12:42

Sin embargo, nadie en su entorno podía darse cuenta. Mientras estaban junto a su cama, trató desesperadamente de comunicarse con ellos. "Quería que supieran que estaba despierta, que podía oírles" explica. "Cuando oí decir al doctor que no podría hacerlo, estaba aterrada. "Era como estar en un sueño terrible, pero uno en el que estaba despierta", informa Daily Mail.

Brisa Alfaro, artista de las uñas, cayó en coma después de sufrir un derrame cerebral en 2014, cuando tenía sólo 32 años de edad. Su memoria a corto plazo se ha visto afectada por el incidente, y no puede recordar los detalles completos o fechas de lo sucedido. Sin embargo, recuerda que viajaba en avión desde Los Ángeles a Nueva York cuando sufrió una reacción alérgica grave, de cuya causa no está segura. "En el avión mi cara comenzó a hincharse y me sentía muy mal", explica. "Tan pronto llegué a casa, inmediatamente me tomé dos pastillas para la alergia y me fui a dormir. Tenía la esperanza de que me sentiría mejor, pero no pasó".

Al sentirse débil al despertar, Brisa Alfaro hizo una vídeo llamada a su madre Linda a su casa de California que, al ver el rostro hinchado de su hija, le dijo que fuera al hospital. Al llegar a su hospital local en Queens, Nueva York, fue tratada por su reacción alérgica. Pero, mientras se sentaba en la cama del hospital, sufrió un derrame cerebral grave. Todavía no recuerda lo que sucedió después, pero fue trasladada al Hospital Universitario Presbiteriano de Nueva York.

"Curiosamente, los médicos no creen que la reacción alérgica que sufrí estuviera vinculada a la crisis", explicó. "Piensan que fue sólo una coincidencia y en realidad no conocen la causa del accidente cerebrovascular. Si no hubiera estado en el hospital, no me habrían tratado tan rápidamente y podría no haber sobrevivido", añade.

La familia de Brisa, incluyendo a su madre, a su padre Gus y sus hermanos Omar, de 37 años, y Jordan, de 30 años, volaron inmediatamente para estar junto a ella mientras estaba inconsciente. Aproximadamente una semana después, se despertó pero, alarmantemente, nadie se dio cuenta al estar inmóvil y muda. "Podía oír a mi familia y a los médicos moverse. Hablaban de mí, de mi pronóstico y tratamiento. Pero no sabían que estaba despierta", indica.

Tras dos meses de inmovilidad y horror, movió los dedos. Su madre se dio cuenta y alertó al médico. A partir de ahí, las cosas poco a poco comenzaron a mejorar. El resto de sus extremidades comenzaron a temblar. Así, poco a poco salió del coma, aunque seguía estando muy débil.

Durante tres meses, estuvo alimentada con una sonda, y aunque al principio tuvo que usar una silla de ruedas, poco a poco empezó a recuperar el uso de las piernas. Decidió publicar sus progresos en Instagram bajo el hashtag #nomorebaddays, y ya tiene cientos de seguidores. "Mi vida ha cambiado más allá del reconocimiento. Pero después de haber estado en coma, y despertado, sé lo afortunada que soy", concluye.