Según ha informado la Policía en un comunicado, las investigaciones se iniciaron en mayo de 2014 tras la denuncia de la empresa perjudicada, cuyos responsables se percataron de la falta, desde hacía varios meses, de diversos productos del almacén cuya salida no estaba acreditada de manera fehaciente.
Los agentes descubrieron que los principales autores del hurto continuado podrían ser trabajadores o ex trabajadores de la empresa, en concreto un grupo de personas pertenecientes a un mismo núcleo familiar. Estos individuos pagaban unos 600 euros al mes a diferentes trabajadoras de la empresa para que sacaran productos del almacén y los hicieran llegar hasta un punto determinado de las instalaciones.
Allí una mujer introducía supuestamente lo robado en una caja de reparto y su novio, habitualmente en la recepción, se encargaría de distribuir las cajas a los compradores. Del reparto de la mercancía se responsabilizaban la hermana de la primera mujer y el padre de ambas, ambos conductores relacionados con la mercantil.
La operación ha culminado con la detención de un total de 19 trabajadores, ex trabajadores y autónomos relacionados con el almacén de productos farmacéuticos, así como de una persona relacionada con una farmacia ubicada en la provincia de Valencia. Los arrestados son considerados presuntos autores de delitos de hurto, contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal.
Los agentes han registrado una farmacia y ocho domicilios en los que se han incautado de más de 15.000 medicamentos, productos de parafarmacia y de cosmética, 2.500 euros en efectivo, nueve teléfonos móviles y 20 fotocopias de DNI y tarjetas de la Seguridad Social que podrían haber sido utilizadas para conseguir medicamentos legales de modo irregular.
Agentes de la Sección de Consumo, Medio Ambiente y Dopaje de la Comisaría General de Policía Judicial, y del Grupo de Estupefacientes de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia han desarrollado las investigaciones.